domingo, 9 de agosto de 2009

Con el fogón apagado .Un poemario del poeta sureño Enrique Ordoñez

Erosión

Corroe el viento la dura roca
Se derrumba
sus partículas, se esparcen
golpea el viento
el pensamiento
el hombre se destruye
erosiona el agua el suelo
desaparece la fertilidad
erosiona el hombre el planeta
la madre naturaleza sufre
esa erosion carcome al alma
y el corazón ya no palpita

Enrique Ordoñez


ACulturización

Hoy mi pueblo
Es bombardeado
Por los bólidos negativos del extranjerismo
Y la sangre de mi raza en su agonía
sufre la importación
de piezas arrítmicas
generadoras de violencia
en el olvido famélico
se encuentra el Xique
Ritmo antiguo
Con que nuestros antepasados
Adoraban a sus dioses
Y por el labio partido de un sofisticado hot-dog
Se derrama en el suelo
El atol,la güirila y el morro
la ceguera aumenta
ya de los labios no brota
Música autóctona
la identidad cultural se desvanece
Y la sangre del indio se pierde.

Enrique Ordoñez


Morazán
Vive tu heroísmo en las montañas
Tu ideal se levanta como ola
en el mar embravecido
Hombre de acero
esculpido en la sangre hondureñista
Tus sueños
no son simples fósiles
impregnados en el olvido
aun palpitan en el corazón catracho
El eco de tu voz
Se expande, repercute
con grito de libertad
hoy tu espada brilla
clamando justicia
la detonación de pólvora
jamás mutilara tu ideal guerrero
Tu esfinge
Adorna los parques, las estrellas
Pero tú
más que una pieza de bronce
mas que una figura decorativa
representas nuestra nacionalidad.

Enrique Ordoñez



Hombre

El sol se cobija en el espanto de la piel
viaja celoso el aroma
en el marginado olfato
y una mano temblorosa
sostiene el plato que astilla
los desorbitantes ojos
persiguen en lo oculto
el pan que se escapa
de la boca frustrada
los dientes crujen al filo del ocaso
palidecen las venas en la oscura campiña
y un ángel deprimido clama
al grano infecundo
de la carne maldita
en trémulo combate
se debate con el hambre
una calabaza sedienta
una gota de sudor
hechizada por le viento
clava sus angustia en la tierra.
Se estremece el vientre
Y el tiempo se escapa en las migajas del silencio.

Enrique Ordoñez

Angustia

En el oscuro vientre del abandono
con el corazón inerte
las alas se cortan
Huye la angustia abismalmente
con pie ligero de terror
se confunden las harapientas lagrimas
en el laberinto del silencio eterno
los ideales se marchitan
en el principio sin fin
de un ocaso triste.


La calle sola

Camino cabizbajo
en la tenue tarde
tropiezo arrastrando penas
un perro ladra ala vacio
Obscurece
y una paloma alza vuelo
El viento con alas de soledad
mueve las ramas de los arboles
Entre agujeros de tristeza camino
detengo mis pasos
los recuerdos me invaden
en la calle sola
publicado en el Otro Horizonte en 1994


El cuarto vacio

una centella de luz
se filtra por un agujero del techo
el silencio tortura
como grito de angustia
se escuchan
voces imaginarias del pasado
Deslizan por la pared
gotas de sudor
Desprende el alma una lágrima
Y un suspiro se escapa
Como fantasma que no volverá.